La Universidad Pedagógica Nacional (UPN) está comprometida con la igualdad de género, por ello se ha propuesto conformar un equipo de trabajo en el que las mujeres tengan un papel efectivo e importante. Evidencia de ello es el informe de la Ley de Cuotas que realizó la Oficina de Control Interno y que deben presentar todas las entidades públicas, pues en Colombia se busca que las mujeres ocupen muchos más los cargos de Dirección del Estado y que hagan parte de las decisiones pertenecientes a la política pública.
En ese sentido, se realizó un seguimiento y una verificación para establecer si la Universidad cumplía con esa normativa que inició con una ley que establecía que mínimo debía haber un 30% de intervención de la mujer en cargos directivos, pero que en la actualidad dicta que debe existir la paridad. Sobre todo, en los cargos de libre nombramiento y remoción, se solicita que en lo posible sean mitad hombres y mitad mujeres.
El resultado de la indagación arrojó que, de acuerdo con la información reportada por la Subdirección de Personal para la vigencia 2022, la participación de la mujer en cargos de Máximo Nivel Decisorio es de 75% y en cargos de Otros Niveles Decisorios es de 59%. Por otro lado, del total de hombres y mujeres en funciones directivas, el 62% corresponde a plazas ocupadas por mujeres. La relevancia femenina ha sido una marca institucional, pues la profesión docente ha sido históricamente marcada por el trabajo de las mujeres “Creo que esto tiene un sentido, y es que definitivamente la educación es una búsqueda de la equidad entre los seres humanos, explica Yaneth Romero Coca, jefe de la Oficina de Control Interno.
“Lo que hicimos nosotros fue entrar a revisar si la Universidad cumple con esas cuotas de género. Vemos que no solamente las alcanza, sino que está muy por arriba de esa meta básica”, agregó. “Se mantiene una voluntad de darle una significación clara en las direcciones institucionales a las mujeres. Creo que eso se ha logrado y es importante. Las mujeres hemos demostrado en la gestión y la administración ser muy responsables, muy comprometidas con la labor y con el trabajo. Hay una deuda histórica en evidenciar que podemos hacerlo bien”, puntualizó.
Hay entonces una clara apuesta institucional para que las mujeres se visibilicen. No en vano, la historia de esta Universidad nace con el aporte de la profesora Francisca Radke, quien hizo parte de la segunda misión pedagógica alemana que el gobierno colombiano trajo al país entre 1927 y 1935, siendo pionera en la organización del sistema educativo colombiano y aportando en la creación del Instituto Pedagógico Nacional Femenino en 1927.
Ángela Calderón, auditora de la Oficina de Control Interno, dice que el informe, a diferencia de otros años, tiene un valor agregado importante. No sólo cumple con determinar cuál es el nivel de cumplimiento de acuerdo a los criterios que establece el Departamento Administrativo de la Función Pública, que es el que dicta cuáles son los requerimientos que debería tener la Universidad, sino que se intentó también saber cuál es la contribución de la mujer en espacios de nivel directivo, pero que fueron elegidos por terna o por elección, como pasa con los directores de departamento o con los decanos de las facultades.
Para Gina Zambrano, Secretaria General, los resultados del informe son un reconocimiento a la labor que las mujeres han adelantado en la vida universitaria. Es una cualificación que va más allá de un simple cargo, de un ejercicio de funciones. Es exaltar sus conocimientos, su experiencia, el trabajo en equipo y la confianza que logran desarrollar en otros directivos, al asumir estos cargos tan importantes en la Universidad. Para ella, son mujeres preparadas, comprometidas, entregadas a la institución y que desde sus quehaceres permiten que la Universidad pedagógica Nacional (UPN) sobresalga, crezca y cumpla sus objetivos. La educadora de educadores sigue trabajando para aportar a la formación de una nueva generación que le apuesta a una sociedad igualitaria y equitativa.