La Universidad Pedagógica Nacional y la Facultad de Educación llevaron a cabo una nueva sesión de la Cátedra Interinstitucional Normalista, en la cual se realizó una lectura colectiva y una profunda reflexión sobre el texto “La justicia Curricular: El caballo de Troya de la cultura escolar”, de Jurjo Torres Santomé.
Este encuentro surgió en el marco de la cooperación y alianza de las Escuelas Normales y las facultades de educación del país, con el propósito de consolidar comunidades académicas en el campo educativo.
En el marco del evento, se contó con la intervención de maestras y maestros de las Escuelas Normales de Aguadas Caldas, Barrancabermeja, Villavicencio, Ubaté e Istmina Chocó, quienes expusieron sus percepciones sobre las tensiones que pueden generar los contenidos escolares, partiendo de aquellos criterios (raza, género, discapacidades, lugar de nacimiento, religión, entre otros) que no han permitido que todas las comunidades estén representadas en los currículos que se imparten en las aulas de clase.
Además, los participantes pudieron escuchar la exposición de Claudia Liliana Sierra, docente de la Licenciatura en Educación Infantil, quien representó a la UPN y reconoció la importancia de las Escuelas Normales para el sistema educativo del país, al estar presentes en las regiones.
Un aspecto importante encontrado en el texto, ampliamente enunciado por los docentes, es la ausencia de una relación entre las temáticas abordadas en las distintas asignaturas y tópicos trascendentales que afectan la cotidianidad de las y los estudiantes. Cuestiones como la crisis climática, la desigualdad de derechos, el racismo, los conflictos armados, los derechos laborales, la contaminación ambiental, entre otras, no son tratadas en las materias escolares, evitando profundizar en las realidades de las comunidades y los barrios, lo cual da como resultado una ausencia de conexión entre el salón de clase y lo que está sucediendo en el país.
Las y los maestros expresaron que comparten con el autor la preocupación por la evidente división del conocimiento en asignaturas que no se cruzan en ningún momento dentro de los currículos, lo cual fragmenta el aprendizaje y dista mucho de la realidad, pues en la cotidianidad todas las áreas se interrelacionan. A esto se agrega la necesidad de que las y los docentes planteen a las y los estudiantes un panorama claro de su contexto, sin la posibilidad de ocultarles información excusándose en la idea romantizada de su fragilidad o debilidad, pues de no hacerlo, las nuevas generaciones podrían caer en lo que Torres Santomé denomina un “paraíso artificial”.
Llamó la atención de quienes se conectaron a la transmisión de este espacio, que este libro, a pesar de ser publicado en el año 2010, expusiera planteamientos totalmente vigentes en la actualidad.
Durante esta Cátedra, se dejó en evidencia el compromiso de las y los maestros con la participación en la generación de un cambio en las políticas educativas, que en este momento parece viable desde los lugares de construcción que se han generado en el proceso de la reforma educativa planteada por el Gobierno.
La Universidad Pedagógica Nacional le seguirá apostando a este tipo de convocatorias en las que surgen nuevos retos y cuestionamientos para la profesión docente.